Como dibujar un rostro con tinta china


Al igual que la escritura el dibujo tiene una grafología, una caligrafía, y un código de significados en el trazo. Si quieres dibujar un rostro en tinta china debes perder tus temores, ser decidido, tratar de hallar tu propia caligrafía.

Lo complicado de la tinta es que no hay tonos medios en la linea en si, es como un tajo en el papel, no hay titubeos o miramientos endebles, pero, lo que si puedes hacer es aprender a dar el ángulo de ataque a la pluma, y de medir la presión justa. Si aprietas mucho saldrá una mancha, si aprietas poco el trazo resultará entrecortado. Mas en lo demás eres libre, puedes medir tu trazo, cruzarlo, hacerlo en círculos, en garabato, oval, punteando, dando trazos cortos, como de viruta de madera, etc, etc.

Lo que debes acostumbrarte es a no tener miedo por esa línea fuerte y pura, así es el dibujo a pluma, y una vez que lo domines te acostumbraras a ella, incluso llegarás a amarla, a pesar que no perdona errores, es algo así como una novia exigente y poco tolerante, pero la amarás si pasas un buen rato con ella, tienes que pasear en el papel una y otra vez, con ella, con esa dama metálica y poco flexible, todo lo contrario del pincel.

El trazo clásico es un buen comienzo, ya que es ordenado y te dará pulso, pero no está demás que practiques desde un comienzo con el trazo circular y cruzado, mucho más expresivo y fácil de avanzar. El zigzag de trazo corto lo empleaba Goya en su grabados, es excelente para alcanzar realismo sin tener que poseer un pulso extraordinario, como el del Leonardo Da Vinci.

La práctica hace al maestro, pero la sensibilidad a la hora de trabajar lo hace más divertido. Aprende de tus errores y disfruta de tus aciertos.



Es preferible usar una plumilla fina, después prueba con plumas más gruesas, hasta llegar a la pluma de caña, que es para trazos muy expresivos, realmente es de una textura divina, y por ello debo tratarlo en otra clase.

Siempre limpiarás tus plumillas y las secarás, para que no se oxide y pierda fluidez el instrumento de dibujo. Tampoco las hagas caer, si se dobla la punta no volverá a ser la misma.

No la prestes, ya que tu presión es diferente a la de otras manos, y si cae en una mano pesada esta se adecuará a esa presión, y cuando vuelva a tus manos no será igual. Es como una barita mágica, o como si fuera tu mujer... ¿tú la prestarías? igual es la pluma. Debes amarla, ser celoso de ella. No es como el lápiz, que siempre será el mismo, es como una puta, se acomodará a quien la toque y no le importará si lo hace bien o lo hace mal.

Practica en un papel aparte antes de poner el trazo en tu trabajo, y no te olvides de retirar el excedente de tinta antes de sacar la plumilla del tintero, eso evitará que caiga una gota no deseada sobre el papel, o que genere un trazo exagerado y no esperado.

También es valedero hacer un trazo previo a lápiz, ya que como indique más arriba: "la pluma no admite errores". Pero si son pequeños los puedes arreglar raspando con una cuchilla o una hoja de afeitar, pero si la falla es muy insolente nada se podrá hacer... a menos que hagas una técnica mixta, pero eso tiene que ser porque quieres, no porque no te queda otro camino. El mundo del dibujo es muy amplio, pero no por eso hay que temerle.

"Lo que deseo" (técnica mixta: tinta china, aguada, lijado y creta)- por Salvador Núñez

Te deseo el mejor de los éxitos.