El mundo, la caja de Skinner
¿Nunca te has preguntado por que la gente obedece las normas que la sociedad dicta?
La mayoría no se atreve a ir en contra de las ordenes nacidas de los poderes del estado, y esta verticalidad de posiciones permite que la sociedad funcione, en el momento que la autoridad queda cuestionada nada se puede sostener, todo se derrumba.
Entonces ¿cual es la formula mágica con la que se puede ejercer el poder de manera segura? La respuesta es el "condicionamiento operante" de Skinner, y esa receta fue desarrollada entre 1930 y 1950, actualmente sus resultados son empleados para todo el sistema democrático mundial, es decir, libertad del individuo, gobierno del pueblo, y gobierno de la ley, que curioso, lo mismo que sirvió con las ratas esta sirviendo con toda la humanidad.
Si alguien va en contra de las libertades individuales se le castiga privándolo de su alimento o de la libertad, si alguien obedece ejemplarmente se le premia, si alguien no respeta la voluntad de la punta superior de la pirámide se le señala como a un dictador y se preparan los condicionamientos y estímulos para que su pueblo lo odie, por ejemplo: El Cuba la familia Castro no ofrece democracia, entonces se le bloquea económicamente a toda una nación para que ese pueblo odie a su lider, por otra parte a los cubanos exiliados se les daban hasta hace poco tiempo preferencias en EEUU que ningún extranjero tuvo, entre ellas, la nacionalidad norteamericana en calidad de asilado político.
Otro ejemplo: Sadam de Iraq invadió Kuwait, entonces se le dió un bombardeo terrible sobre su población, y finalmente, Sadam Husein fue enviado a morir en la horca por el Alto tribunal Iraquí, es decir, su propia gente, el premio al pueblo Iraquí fueron raciones de comida y campamentos para los que se quedaron si hogar, desgraciadamente los intereses de Estados Unidos fueron más lejos, y los sorbetes insaciables del dolar no pararon de succionar el petroleo del pueblo de Iraq, ahí es que falló el experimento de Skinner, por la ambición humana, y la caricatura de respuesta de todo un pueblo indignado fue el zapatazo de un humilde reportero.
Por último, Israel tomó la determinación de intervenir en Palestina, la razón es que los fundamentalistas de Hamas estaban adquiriendo misiles, y eso no acabó ahí, ahora su fuerza terrestre se ha desplazado para borrar del mapa las intentonas posibles de Hamas a futuro, desgraciadamente ese "futuro" va a durar poco, es obvio que "Hamas jamás se rendirá", van a replegar sus fuerzas y asilarse en países aliados, entonces, la conclusión es que se está llevando con corcel negro todos los argumentos de preámbulo para la tercera guerra mundial, aquí tampoco funcionó el experimento de Skinner.
Entonces ¿por que falló el experimento de Skinner? hay varias respuestas:
1.-Los humanos no son ratas y sus ideales los llevan en muchas ocasiones a despreciar la libertad o la vida misma.
2.-Los dueños de la caja, es decir, los que manipulan las voluntades del mundo no deben ser ratas, sino humanistas.
3.-Los premios a los buenos ciudadanos no deben limitarse a los premios Nóbel, ni a sacarlos en revistas de frivolidades o moda política, la gente de premio quiere comida, educación y salud.
Si vamos a ser tratados como las ratas del laboratorio de Skinner, pues que se sigan todos los principios de piedad y premio para esas ratas, es decir, que se respeten los derechos humanos, claro, algunos me dirán que Skinner llevo a las ratas a límites asombrosos, hasta a la misma muerte, pero la intención de ese científico era ejercer un control sobre la conducta, tratar de que las personas se comporten bien en beneficio de la sociedad, no de que se porten bien para el beneficio de unos pocos, para matar en nombre de una endeble seguridad o para enarbolar la democracia sobre los cadáveres de los que se atrevieron a nadar en contra de la corriente.
La política es una ciencia y es por ello que debe estar en constante evolución, libre de dogmas y en la búsqueda del ideal supremo, la felicidad, el amor y la tolerancia, por que de nada sirve la libertad sin la tolerancia, el gobierno del pueblo sin amor, y el imperio de las leyes sin la felicidad.