Pensándolo bien aveces creo que fue una mala idea hacer este encierro dentro de una casa, pero dudo sinceramente que alguien de espíritu rebelde se tomara la molestia de llevarme los alimentos día a día como lo hace mi madre que el lunes que viene cumple 66 años, es también por ese motivo que me siento doblemente mal, ella es una mujer adulta y yo un porfiado soñador, pero curiosamente ella lo hace feliz y orgullosa, me besa las manos, me manda besos volados y habla de lo importante que es mi tarea por la ecología y la dignidad humana, me ordena a no claudicar y a seguir encadenado los 651 días que faltan, ella es sabia y fuerte, en realidad el motivo de orgullo es de mi hacia ella y no al revés.
Pido disculpas de corazón las veces que no pude abrir la puerta pero estoy encadenado y no puedo alejarme más allá de los 9 metros de la estaca inamovible por mi propia voluntad, a ella no solo lo soldé con mis propias manos, la he convertido en mi hermana y maestra de duro metal.
Nota: A Chava le pido disculpas por no publicar su comentario, este se borró por mi propio descuido, pero a partir de ahora no voy a moderar los comentarios, los insultos y los malos deseso también son interesantes para lo que deseo.